Estas ultimas semanas he estado desconectado de descontroladas.net, y es que me han estado follando por las cunetas, en la playa, en la cama, en el coche y en el sofá ¿me dejo algo?. En realidad a veces nos follábamos y otras hacíamos el amor. Y esto es lo que más miedo me da. Mi conciencia radical me repetía -los queers, no deberíamos enamorarnos-.
No es por seguir con el polémico debate de hartza . Yo siempre había sido chico de una sola noche, en la segunda cita ya me agobiaba. Pero resulta, que a veces te mueres de ganas por estar con una persona. De pasar 24 horas a su lado, acariciándole, comiéndole el sexo, esperando en la cama que te traiga el desayuno, riéndote por cada tontería. Y no pasa nada, derrochar amor también esta muy bien. Y sienta genial al cuerpo. Sin embargo las dudas siempre vienen a la cabeza.
